La nueva industria de la construcción necesita rejuvenecer

Nadie duda de que el sector de la construcción sigue siendo uno de los principales motores económicos y generadores de empleo, tanto en España como en la Unión Europea. Un sector que ha demostrado ser sólido y con fuerte potencial. Un sector que ofrece múltiples actividades para desarrollar una carrera profesional y con oportunidades laborales.

Pero también es un sector que ha entrado en una nueva etapa (la de la “nueva industria de la construcción”) y que necesita rejuvenecer. Según los datos del último informe del Observatorio Industrial de la Construcción de la Fundación Laboral de la Construcción, actualmente es un sector envejecido. Y aporta un dato: los ocupados mejores de 30 años en la construcción se ha reducido del 25,2 al 9,2% desde 2008 hasta 2022. Y, por el contrario, el número de trabajadores mayores de 50 años se ha incrementado hasta representar el 35% del total.

Papel clave en la ejecución de los Next Generation

La industria de la construcción tiene un papel clave en la ejecución de los fondos europeos Next Generation. Tal como se destaca en el informe, y según las estimaciones de los agentes sociales del sector, “siete de cada diez euros de las ayudas comunitarias para el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia se canalizan a través del sector”.

Un protagonismo que conllevará también un desarrollo y crecimiento del sector, y la necesaria demanda de trabajadores para acometer el incremento de la actividad constructiva. En un momento, además, en el que, al igual que el resto de la sociedad, la construcción está inmersa en una transición para adaptarse a los requerimientos que demanda su proceso de industrialización.

Una transición que exige profesionales capacitados y formados. Por ello es por lo que preocupa un relevo generacional que no se está produciendo, ahondando en una escasez de profesionales que puede llegar -afirma el informe- “a afectar considerablemente al desarrollo de la actividad constructiva, así como a los fondos y ayudas comunitarias”.

La construcción, un sector que ofrece múltiples actividades para desarrollar una carrera profesional y con oportunidades laborales. Clic para tuitear

Se busca rejuvenecer el sector

Por todo lo anterior, se antoja como primordial la inmediata inclusión en la construcción de personas jóvenes. Tal como se ha mencionado al principio, desde 2008 a 2022, la cantidad de personas jóvenes (menores de 30 años) ocupadas en el sector se ha reducido del 25,2% al 9,2%. Mientras que las personas ocupadas de 50 y más años, que son las que se jubilarán en un corto-medio plazo, se han incrementado y suponen el 35% de la fuerza laboral del sector en 2022.

A todos los frentes abiertos en esta transición del sector de la construcción, habría que sumar la demanda de profesionales especializados en oficios: albañiles, pintores, electricistas, etc. Una demanda que pone de manifiesto urgente necesidad de talento cualificado.

Tal como menciona el informe del Observatorio Industrial de la Construcción, la “nueva industria de la construcción” hacia la que nos encaminamos “demanda personas trabajadoras con cualificación, que preserven la continuidad de los oficios y desarrollen competencias emergentes, con perfiles tecnológicos. La construcción se encuentra en permanente desarrollo, donde aparecen nuevos materiales y técnicas que permiten la especialización, una especialización a la que solo se puede acceder a través de la formación”.

Ante este reto, la Formación Profesional (FP) se decanta como una excelente opción para proporcionar al sector la mano de obra cualificada que requiere y requerirá en el futuro. Una Formación Profesional que también está experimentando una transformación acorde a los cambios sociales e introduciendo en sus contenidos novedades transversales como la digitalización o la sostenibilidad aplicada al sistema productivo.

La construcción se encuentra en permanente desarrollo, donde aparecen nuevos materiales y técnicas que permiten la especialización, una especialización a la que solo se puede acceder a través de la formación”. Clic para tuitear

Los cambios tardarán en ser visibles

En cualquier caso, desde el sector también se destaca el hecho de que los efectos de las modificaciones introducidas en la Formación Profesional tardarán en hacerse notar en el plano laboral. A corto plazo, por tanto, “no podrá abastecer la cantidad de personal que se necesita en la construcción”.

El problema no es baladí, pues también afecta a los perfiles algo más técnicos. Hace escasas semanas, el Gobierno publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) un nuevo catálogo de ocupaciones de difícil cobertura, por el que autoriza a las empresas a contratar trabajadores en países extranjeros.

En concreto, permite que las compañías busquen en el exterior profesionales de carpinteros de aluminio, metálico y pvc; montadores de carpintería metálica, aluminio y pvc; instaladores electricistas de edificios y viviendas; instaladores electricistas en general; conductores-operadores de grúa en camión; conductores-operadores de grúa fija o conductores-operadores de grúa móvil.

Es labor de todos los que integramos el sector de la construcción hacer atractivos a ojos de nuestros jóvenes estos oficios, así como apoyar y acompañar la formación de profesionales cualificados que se integren en la “nueva industria de la construcción”. En beneficio de todos.